La captura en video y viralización de una brutal golpiza policial contra un anciano en Chile durante las protestas masivas realizadas el fin de semana desató la furia en las redes sociales y obligó ayer al gobierno a abrir una investigación por el uso excesivo de la fuerza por parte de Carabineros.
En las imágenes se ve cómo dos agentes toman del cuello y golpean salvajemente a un adulto mayor, que había acompañado a su esposa e hija a la marcha del 8M en Plaza Dignidad. “Soy de la tercera edad. Ellos en estas situaciones se ciegan, no tienen un criterio formal”, lamentó el hombre en medios locales después de la golpiza.
La clase política también reaccionó y reavivó el debate sobre la intervención de Carabineros, en tanto que Human Rights Watch calificó al ataque como un “espectáculo grotesco de brutalidad policial”. En el video se observa cómo el hombre, que nunca opuso resistencia, era maltratado con toletes, golpes de pies y de puños. Incluso cuando tres mujeres lo intentan rescatar, los oficiales siguen agrediéndolos.
“Fue tan innecesaria la violencia que cayó sobre mí. Carabineros repartió lumazos a diestra y siniestra, fue imposible evitarlo”, dijo el hombre atacado, Patricio Bao, de 69 años. “El hecho de exigir mis derechos no implica necesariamente violencia de mi parte. Carabineros actúa en forma desmedida, sin ningún criterio contra una persona”, continuó el hombre, notablemente golpeado.
Bao contó que tras su detención, estuvo mucho tiempo sangrando, pero recién lo llevaron a constatar lesiones después de varias horas. Según explicó, le debieron hacer diez puntos por una herida considerable en la frente y otros cuatro en el párpado del ojo derecho.