By Este lunes las instalaciones del Instituto para la Excelencia en los Negocios del Gas, Energía e Hidrocarburos (INEGAS), amanecieron tomada por 10 de sus trabajadores quienes exigen al rector Saúl Rosas certidumbre acerca de su futuro laboral.
Para ello, solicitan que se les acepte como trabajadores institucionalizados de la universidad, mediante contratos indefinido.
Actualmente ellos están ligados directamente a INEGAS y es esta institución la que les paga sus sueldos desde hace 8 años, con recursos propios que se genera de los cursos y programas de postgrado que se imparte en las áreas de hidrocarburos e ingeniería.
Sin embargo, esta institución dejará de manejar sus recursos propios como lo venía haciendo desde su creación en el año 2005, ya que la administración pasará a manos de la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología, una decisión que tomó el rectorado en febrero de este año.
Ahora, los 10 trabajadores que tenían contrato indefinido con INEGAS están con incertidumbre, ya que depender de la Facultad de Tecnología significaría perder el contrato indefinido y pasarían a ser trabajadores eventuales.
“Vino el asesor legal de la Facultad de Tecnología y nos dijo que ellos no tenían trabajadores indefinidos y que nos olvidemos de eso”, señaló uno de los trabajadores que prefirió no dar su nombre por temor a represalias.
INEGAS fue creado el 25 de marzo del 2005, bajo un convenio interinstitucional firmado entre la UAGRM y Petrobras Bolivia, con el objetivo de brindar servicios técnicos especializados y capacitación postgradual en el área de hidrocarburos y energía.
Este convenio duró hasta el 2017, por lo que desde aquella fecha los trabajadores aseguran que el rectorado les viene prometiendo que van a formar parte de la planilla institucional de la UAGRM, pero que hasta la fecha eso no ocurre.
Primer acercamiento
Esta mañana, representantes legales de la ‘Gabriel a la cabeza de Gabriel Salvador Atila tuvieron una breve conversación con los trabajadores de INEGAS. Se les garantizó su estabilidad laboral y programaron una conversación más formal con el rector o un representante de esta autoridad para las próximas horas, con la finalidad de llegar a un acuerdo.
Por su parte, los trabajadores señalaron que no tienen ninguna intención política en esta protesta y que solo buscan que el rectorado les cumpla con lo prometido.
