By La magnífica tumba de un noble germánico que vivió hace 1500 años fue descubierta en Alemania, a unos 200 kilómetros al suroeste de Berlín. El sitio es “el hallazgo arqueológico más importante del país de los últimos 40 años”, sostuvieron expertos consultados por el Daily Mail.
Por esa razón, justamente, los investigadores decidieron mantener en secreto la ubicación exacta de la excavación para evitar el acecho de ladrones.
Las excavaciones comenzaron cuando un grupo de trabajadores limpiaba un terreno en Brücken-Hackpfüffel para construir una nueva granja de pollos. Fue en ese momento cuando, literalmente, “chocaron” con el cementerio de una corte real.
Si bien en el lugar encontraron los restos de una persona de alto estatus, los arqueólogos aún están buscando al príncipe que sospechan que está enterrado allí.
Un cuenco de vidrio muy bien conservado que fue encontrado en la tumba. Ya está siendo analizado en laboratorio. Foto: DPA
Actualmente, la teoría que se impone sostiene que las cenizas del noble podrían estar adentro de un caldero de bronce en la tumba central. Este está en un montículo en el centro tumba, rodeado por seis mujeres que se encuentran enterradas de forma radial como las agujas de un reloj.
Los investigadores aseguran que estas mujeres podrían haber sido concubinas o viudas del noble enterrado, pero sigue siendo un misterio si fueron asesinadas para el entierro o si ellas mismas se sacrificaron.
Si bien hay muchas especulaciones sobre las causas de este extraño arreglo funerario, los expertos aseguran que aún es demasiado temprano para hablar de un culto ritual de la muerte.
Más allá de esta tumba central que creen que pertenece a un personaje de alto rango, descubrieron alrededor otras 60 tumbas que fueron posteriormente enterradas en el cementerio para honrar al señor. De hecho, en ellas se encontraba un rico ajuar funerario.
Un broche, también en muuy buen estado. Foto: DPA
En particular, hallaron una copa y un espiral de carretel de vidrio, un broche cubierto de plata, una espada y un escudo. También identificaron una moneda de oro con el retrato del emperador bizantino Zenón, acuñada en 480. Los investigadores resaltan el carácter sofisticado de los objetos, detalló el sitio RT.
En el túmulo, además, se encontraron restos de once animales, entre los que hay bovinos, caballos y perros.
El caldero -al que los arqueólogos creen fundamental para la historia de la tumba- ya fue retirado y será analizado cuidadosamente en un laboratorio.
